El Ayuntamiento de Barcelona propondrá a las entidades bancarias que instalen cajeros automáticos en dependencias municipales, como centros cívicos u hogares de jubilados, en barrios de la ciudad donde los bancos han reducido oficinas en los últimos años. Está previsto que el consistorio plantee esta propuesta a la banca en una reunión con responsables del sector que tendrá lugar este mes de enero. Así lo ha avanzado en EFE el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni, que cree que en la ciudad “ha habido un auténtico desmantelamiento de la red de oficinas bancarias”.
Collboni apunta que la pandemia y las nuevas tecnologías han favorecido el pago electrónico de forma generalizada, pero han dejado fuera un porcentaje de personas mayores, “que no tienen acceso a las nuevas tecnologías ni a un cajero a menos de un kilómetro”.
La propuesta del Ayuntamiento de Barcelona a las entidades bancarias será la de desplegar cajeros automáticos en diferentes equipaciones públicas, especialmente en territorios donde, previo estudio, se haya detectado una carencia considerable de estos dispositivos. El proyecto forma parte de las actuaciones que está llevando a cabo el Ayuntamiento de Barcelona para reducir la desigualdad digital.
Otra acción ha sido la licitación, el noviembre del 2021, de la concesión de “servicios para la comercialización de servicios bancarios” a las estaciones de la red de metro y el funicular y el teleférico de Montjuic. Entre las ubicaciones escogidas se encuentran las estaciones de metro de Cataluña, con más de nueve millones de validaciones anuales, España, Sants Estación, la Sagrada Familia, Paseo de Gracia, la Sagrera, Maria Cristina, Diagonal, Liceo, Astilleros, Universidad, el Pueblo-seco o Ciutadella.
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