El silencio es una de las mayores barreras que hay que vencer: denuncia el maltrato a las personas mayores.
La dependencia, la relación de confianza y la sensación de no poder reaccionar como se querría hacen que se normalicen situaciones que nunca se habrían tenido que aceptar. Por eso, como persona mayor, antes que nada tienes que saber si te sientes respetado, si vives en libertad o si, al contrario, sufres maltratos.
No respetan mis derechos cuándo:
- Familiares y personas de mi entorno no me respetan.
- No se tienen en cuenta mis opiniones.
- Me tratan como si fuera una criatura.
- No puedo decidir qué hago durante mi tiempo libre.
Maltrato: violencia física
Se trata de aquellas acciones (dar golpes, bofetadas, quemar, encerrar a una persona mayor, usar inadecuadamente la medicación) que producen un daño o una lesión física de manera intencional.
Dentro de esta categoría también se incluyen el ejercicio de coacción física o el hecho de restringir la libertad de movimiento mediante la fuerza física o el uso de drogas.
Maltrato: violencia psicológica
Se trata de aquellas acciones que pueden causar de manera intencionada angustia, sufrimiento, pena, sentimientos de indignidad, miedo o estrés mediante actos tanto verbales como no verbales.
Dentro de esta categoría se incluyen las agresiones verbales, amenazas (de violencia física, de institucionalización, etc.), aislar de sus amistades y/o familiares, impedir sus actividades cotidianas, tratar a una persona con indiferencia, dejar de hablarle, así como cualquier otro acto de intimidación, humillación o que pueda provocar malestar psicológico.
Maltrato: violencia sexual
Implica cualquier contacto o comportamiento de carácter sexual, ya sea un intento o la consumación del mismo, en el cual la persona mayor no haya dado su consentimiento o no es capaz de otorgarlo.
Por violencia sexual se entiende un amplio rango de actuaciones que pueden ir desde el exhibicionismo o el acoso hasta las relaciones sexuales, incluyendo: caricias, gestos, la obligación de desnudarse o de ver fotografías sexualmente explícitas. Dentro de esta categoría también se incluyen todas aquellas barreras establecidas para que, tanto hombres como mujeres mayores, impidan llevar a cabo sus deseos sexuales, tratándose así de una forma de coacción de aquellas manifestaciones que puedan contribuir a su estabilidad, su bienestar y su integridad como personas.
Maltrato: violencia económica
Implica el robo o bien el uso ilegal, no autorizado o inadecuado, de los fondos, propiedades o recursos de una persona mayor, causando un perjuicio para el afectado/a y un beneficio para la otra persona.
Por violencia económica se entiende un amplio rango de actuaciones que pueden ir desde obligar a modificar el testamento hasta la sustracción de dinero y bienes patrimoniales, la falsificación de su firma o el chantaje.
Maltrato: negligencia
Consiste en un acto de omisión intencional o no intencional, una carencia en el desempeño de las necesidades vitales de una persona mayor, por parte de la persona encargada de su cura.
Hay dos tipos de negligencia:
- La negligencia física tiene lugar cuando la persona cuidadora no proporciona los servicios y productos necesarios para el funcionamiento físico óptimo de la persona mayor. Un ejemplo sería el hecho de no proporcionar comida, agua, bastones o cualquier otro dispositivo de ayuda necesario, o bien no facilitarle asistencia sanitaria, higiene personal, administración de fármacos, etc.
- La negligencia psicológica o emocional se da cuando la persona cuidadora no ofrece el apoyo o la estimulación social y emocional adecuada y necesaria para la persona mayor. Un ejemplo sería ignorar sus peticiones o bien no ofrecerle las noticias e informaciones que puedan interesarle.
- No estás solo. Si crees que estás viviendo situaciones injustas que ponen en peligro tu integridad, no dudes y pide ayuda. Tienes muchas vías para conseguir que se respeten tus derechos.
- Explica qué te pasa a una persona de confianza.
- Si dispones de servicio de teleasistencia móvil, contacta con el operador. Siempre habrá alguien a la otro lado para ayudarte, a cualquier hora del día.
- Puedes ponerte en contacto con tu centro médico, con los servicios de atención a la familia, con el casal de las personas mayores, con los Mossos d’Esquadra o con la Policía Local.
- Llama al teléfono de emergencias 112. Es gratuito y funciona las 24 horas, 365 días al año.
Si es así, actúa y comunícalo:
- A los servicios sociales de tu Ayuntamiento
- A los servicios sociales de la Generalitat de Catalunya
- A los servicios sociales de la Diputación
- A los Mossos d’Esquadra
- A la Policía Local
- Llama al 112
Y ayuda tanto como puedas a esta persona mayor a entender que no está sola y que tiene unos derechos a los cuales no tiene que renunciar bajo ninguna circunstancia.