Las ayudas técnicas son dispositivos, aparatos o sistemas que facilitan la realización de actividades cotidianas a personas con dificultades para llevarlas a cabo de manera autónoma. Estas herramientas permiten a nuestros mayores mantener su independencia, promoviendo su bienestar y mejorando su calidad de vida.
Ejemplos de ayudas técnicas:
Bastones y andadores: Estos dispositivos brindan apoyo y estabilidad al caminar, lo que resulta especialmente útil para personas con problemas de equilibrio o movilidad reducida.
Sillas de ruedas: Las sillas de ruedas pueden ser manuales o eléctricas y son ideales para quienes tienen dificultades para desplazarse a causa de enfermedades o lesiones.
Ayudas para el baño: Barras de apoyo, sillas de ducha y asientos elevadores facilitan el aseo personal y evitan accidentes en uno de los lugares más peligrosos del hogar.
Ayudas para vestirse: Existen herramientas como calzadores de zapatos con mangos largos, pinzas para abotonar y dispositivos para subir cremalleras que pueden facilitar enormemente el proceso de vestirse.
Ayudas para la cocina: Cortadores de alimentos con ventosas, abrelatas eléctricos y utensilios con mangos ergonómicos son solo algunos ejemplos de cómo las ayudas técnicas pueden facilitar la preparación de alimentos.
Ayudas para la comunicación: Teléfonos con teclas grandes, dispositivos de amplificación de sonido y aplicaciones de lectura de pantalla son algunas soluciones para mejorar la comunicación en personas con problemas auditivos o visuales.
Cómo obtener ayudas técnicas
Antes de adquirir una ayuda técnica, es fundamental realizar una evaluación de las necesidades específicas de la persona. En algunos casos, será necesario acudir a profesionales como médicos, ortopedas, terapeutas ocupacionales o fisioterapeutas para que orienten en la elección de la herramienta adecuada.
Además, es importante investigar sobre las distintas ayudas técnicas disponibles y comparar precios y calidades. Algunas de estas herramientas pueden ser costosas, pero existen ayudas a las que se pueden optar para hacerlo más asequible para aquellos que realmente lo requieran.
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Conclusión
Las ayudas técnicas son herramientas valiosas que pueden mejorar significativamente la vida de nuestros seres queridos mayores. Al facilitar tareas cotidianas y promover la independencia, estas herramientas les permiten disfrutar de una mejor calidad de vida y fomentan su autoestima. No subestimemos el poder de estas desconocidas ayudas técnicas y comencemos a explorar cómo pueden cambiar la vida de quienes más queremos.
Maria Schröder Vilar
Farmacéutica-Nutricionista-Ortopeda