Fuente: La Vanguardia
La residencia Sant Hilari Sacalm lleva a cabo un ensayo donde los residentes son los que deciden: se levantan a la hora que quieren, cada cual decide como vestirse, el menú se consensúa cada semana en asamblea y los familiares entran y salen con toda naturalidad. Cada residente tiene su auxiliar de referencia, que le sigue y anota las variaciones y las peticiones en su carpeta. El objetivo es que cada cual envejezca como decida y que se sientan cómo si estuvieran en su casa. Para que la evaluación sea útil han reproducido en esta pequeña unidad de convivencia los diferentes perfiles de residentes y en las mismas proporciones.
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